El Hospital de la Baxada incorporó un nuevo servicio. Se trata del control de marcapasos cardíaco, un pequeño dispositivo que funciona con pilas y se utiliza para percibir el ritmo del corazón y contribuir a su normal funcionamiento.
¿Y vos cómo estás del corazón?
Viernes, Septiembre 28, 2018
El término enfermedades cardiovasculares es usado para referirse a todo tipo de enfermedad de las arterias coronarias, que son relacionadas con el corazón o los vasos sanguíneos (arterias y venas). De acuerdo con el Dr. González, perteneciente al Servicio de Cardiología del Hospital de la Baxada, “es un concepto amplio que comprende un abanico muy variable de patologías, como la cardiopatía isquémica (infarto agudo de miocardio, angina de pecho, etc.), hipertensión arterial, arritmias, insuficiencia cardíaca y otros trastornos que no tienen su origen en el corazón pero comprometen su funcionamiento, como la diabetes mellitus, dislipemias, la obesidad y el sobrepeso o hábitos como el tabaquismo. Se puede aseverar que este grupo de enfermedades son la principal causa de muerte en nuestro país”.
¿A qué factores de riesgo se deben las ECV?
Entre los principales factores de riesgo de las ECV se encuentra la edad, el tabaquismo, el sedentarismo y las dietas desequilibradas (altas en grasas saturadas, grasas trans y sal, y bajas en frutas, verduras y pescado). Según González, “las enfermedades cardiovasculares no se producen por un solo elemento sino por la combinación de múltiples factores de riesgo cardiovasculares, entre los que se encuentran: hipertensión arterial, diabetes mellitus, obesidad y sobrepeso, tabaquismo, sedentarismo, stress, hipotiroidismo, entre otros desencadenantes que surgen de un estilo de vida que generalmente incluye una mala alimentación, la falta de descanso apropiado y de ejercicio físico”.
En este sentido, González explicó que existe una íntima correlación entre las diversas enfermedades del grupo que conforma las ECV, dado que cada una de ellas puede contribuir o determinar el desarrollo de otra. “Como ocurre habitualmente con la alta incidencia de cardiopatía isquémica de la población que presenta previamente hipertensión arterial, diabetes, tabaquismo, obesidad o la combinación de varios de estos elementos. De hecho, lo que hoy se puede observar en el consultorio no escapa a lo expuesto y divulgado en los últimos estudios epidemiológicos/científicos sobre ECV, en los cuales se destacan con mayor frecuencia pacientes con diagnóstico principalmente de hipertensión arterial, asociado a uno o más de los factores de riesgo mencionados”.
¿Cómo prevenir las ECV?
Al tratarse de enfermedades que se desarrollan debido a múltiples factores, la prevención también responde a una combinación de elementos que inciden en la vida diaria. “Se puede comenzar por cambiar aquellos hábitos que son nocivos para la salud en general, no sólo para el corazón”, explicó González y agregó “por ejemplo, realizar la consulta con un nutricionista y desarrollar un plan alimenticio saludable, ingerir agua diariamente en vez de gaseosas, realizar actividad física regularmente y adaptarla al nivel de exigencia de cada persona a los fines de controlar el peso corporal y lograr un nivel de entrenamiento cardiovascular adecuado”.
¿Cuándo recurrir al médico?
González remarcó la importancia de los controles médicos periódicos para cualquier persona, presente o no síntomas de una ECV, ya que los chequeos tienen el objeto de disminuir las posibilidades de eventos fatales o incapacitantes, mejorando la calidad de vida si a su vez éstos se combinan con la incorporación de hábitos saludables. No obstante, detalló que los controles “serán más frecuentes a medida que las personas envejezcan y presenten enfermedades cardiovasculares”.
Por último, afirmó que “las ECV presentan un incremento al ir aumentando la edad de la población, con predominio marcado en los hombres hasta los 50 o 60 años, edad a partir de la cual, por cambios hormonales, las mujeres equiparan el riesgo de los hombres de sufrir una enfermedad cardiovascular”.